DESARROLLO
Y DECADENCIA DE LA HUMANIDAD
Desde
un tiempo inmemorable, que se podría calcular por miles de millones
de años, existe el planeta tierra. A partir de entonces hasta
nuestros días, la búsqueda y el desarrollo de la técnica, ha sido
imparable. Comenzó en la Edad de Piedra, para después ir
evolucionando hasta nuestros días.
El
ser humano no ha parado en su empeño de inventar y crear nuevos
elementos de producción y progreso, hasta llegar en dónde ahora nos
hemos instalado. Una carrera imparable y frenética.
Hoy
en día, sería impensable el poder subsistir sin tantas cosas que
con el tiempo se han hecho imprescindibles.
Como
pueden ser, los alimentos, vestimentas, el fuego, la luz, medios de
transporte, viviendas con electrodomésticos, baños, cocinas y toda
la inventada maquinaria, y que sin ella, ya no se concibe el poder
vivir dignamente. Desde el televisor o frigorífico, hasta lavadoras,
aspiradoras, cine, música, el desarrollo de un lenguaje perfecto.
Sin olvidar la informática.
Y
tantas y tantas cosas, incluyendo el cada vez más destructivo
armamento nuclear, el que entre otras atrocidades, podría causar la
desaparición del mundo en unos instantes.
Nuestro
origen sigue siendo un misterio sin resolver. Existen diferentes
versiones que cada cual acomoda a sus creencias o religión. Pero lo
cierto es, que aún se desconoce como comenzó el origen verdadero
del ser humano. Parece ser que los primeros ancestros debieron ser de
origen africano, siendo así, no debiéramos menospreciar a nuestros
antepasados, lo que hacemos con bastante frecuencia.
El
avance de la sabiduría y creatividad, discurre a tal velocidad, que
se siente como una sensación de vértigo difícil de describir,
asumir y comprender.
Por
siglos, los dioses o símbolos han estado presentes. Se pensaba, y
siguen pensado en muchos lugares, que son esos dioses los que mueven
el mundo. Si bien es cierto que la ciencia ha demostrado, una y mil
veces, que no es así.
Desde
China a todo el continente asiático y Oceanía, desde el Egipto de
los Faraones a la antigua Grecia, hubo varios periodos de prosperidad
y muy creativos, con miles de personas sabias que han llegado hasta
nuestros días.
Siendo
su sabiduría y arte, la envidia y admiración de los clásicos y
poderosos, particularmente de los romanos.
Estos
conquistaron la mayor parte de Europa y el cercano oriente, e
influyeron en aquel tiempo, aportando cultura, guerra y prosperidad
pasajera. Fueron transcurriendo periodos muy largos de grandiosidad y
decadencia, hasta el descubrimiento de América. Y desde allí, ya en
el siglo XX, el viaje a la luna. Algo impensable, tan sólo un siglo
antes, porque nadie hubiese imaginado semejante hazaña.
El
término Ario, es un concepto mitológico y se supone que comenzó en
Irán formándose tribus llamadas arias,que más tarde, se
extendieron a otros pueblos y en muchos casos eran considerados como
dioses.
Más
recientemente, adoptaron el término «ario», los nazis
alemanes y otros pueblos de Europa, ya que en su fanático
nacionalismo, creían que era una raza superior que procedía de
Ario.
El
avance de la ciencia, la tecnología, la medicina y la cirugía, con
trasplantes de casi todos los órganos del cuerpo, son pasos de
gigante y sin duda hace que nuestra vida sea mucho mejor, y por
supuesto, más globalizada, gracias a los medios de comunicación.
Constatando así las teorías del filósofo y pensador McLuhan, un
prestigioso canadiense de nuestro tiempo.
Por
otro lado, existen personas sabias manteniendo la opinión, de que el
mundo camina hacia su destrucción, precisamente a causa de las
guerras, los adelantos y el impacto de las tecnologías que
contaminan el medio ambiente. Lo peor es que sabiéndolo, no se hace
casi nada para evitarlo. ¡Cómo qué no nos afectara a nosotros! Sin
darnos cuenta de que nuestro mundo es vulnerable y pequeño como un
pañuelo en la inmensidad del universo.
Dicen,
que todo lo que nace muere, y un día ocurrirá lo mismo con nuestro
hermoso planeta tierra. Ojalá no presenciemos tal hecatombe, que sin
duda llegará, quizás dentro de millones de años, o, no tantos.
Quién sabe…
A
pesar de todo pienso, que de todas las maravillas creadas, o nacidas,
no hay nada que iguale el prodigio del cerebro y la perfección del
ser humano, aunque en muchos casos, ellos mismos nos pueden llevar a
la destrucción.
Eumenia
Rodríguez - 18 – 1 – 2012.
De tu reflexión me quedo con el último párrafo, y de ese párrafo con la última palabra; DESTRUCCIÓN.
ResponderEliminarEl ser humano es capaz de las mayores atrocidades, yo de siempre he mantenido, en contra de la opinión de otros, que el ser humano es malo por naturaleza, lo dificil es tener buenos comportamientos y buenos deseos.
En un libro que estoy leyendo ahora, "el pintor de batallas" de Pérez Reverte, me encuentro que en las páginas de 106 a 108 dedica un extenso comentario a esto precisamente "EL HOMBRE TORTURA Y MATA PORQUE LE GUSTA, ES LO SUYO", y "NUESTRA INTELIGENCIA SUPERIOR HACE MAS EXCELENTE Y TENTADORA NUESTRA MALDAD".
Tu artículo me ha gustado mucho.
Un cordial saludo de JUSTO